domingo, 11 de octubre de 2009

GUERREROS O AVESTRUCES

En el tema de hoy hablaremos de una emoción básica. EL MIEDO, y como sin darnos cuenta, va moldeando nuestra vida. Les explico. El miedo surge cada vez que se presenta algo en el entorno que nos es difícil descifrar. Por ejemplo, los niños pequeños se asustan cuando escuchan algún ruido muy fuerte, de origen desconocido e inesperado. Su reacción natural es que se ponen a llorar. Pero como adultos, si no aprendemos a moderar nuestros miedos, nuestras acciones estarán muy limitadas.

Como emoción básica el miedo cubre una función muy importante, de supervivencia. Ante el miedo se dispara la adrenalina. Preparándonos para atacar o para huir. Sin embargo, hay quienes en lugar de reaccionar así, se sienten paralizados por su miedo.

¿De qué manera, una persona se va convirtiendo en una especie de avestruz, “que esconde la cabeza” cuando tiene miedo? Esas personas que se atemorizan cada vez que tienen que enfrentarse a nuevas situaciones, demostrando una gran inseguridad en sí mismas, desarrollaron la idea de que “no pueden” hacer las cosas. Si revisamos sus antecedentes, es muy probable que de pequeños, hayan tenido a su lado a una figura demasiado aprensiva, sobreprotectora que les transmitió la idea de que el mundo es demasiado amenazante y peligroso como para atreverse a hacer cosas que “pongan en riesgo a uno”… pero también puede haber sido una figura cercana de esas demasiado amenazadoras, prepotentes que señalan los errores, y juzgan como “torpe” al niño, sin haberle enseñado como hacer bien las cosas. En cualquiera de los casos, una persona que actúa como avestruz, suele estar acostumbrada a evadir las responsabilidades. Una característica es su constante indecisión, y no poder aprovechar las oportunidades que le llegan, o en el peor de los casos, esconderse cuando tiene algún problema, queriendo creer que el problema desaparecerá “mágicamente”. Mucha gente entra en crisis, llegando a situaciones extremas, cuando se siente atrapada por sus problemas, al no sentirse capaz para enfrentarlos.

Desarrollar la capacidad para enfrentar los problemas es una responsabilidad de cada uno. ¿A quién le gusta tener que estar escondiéndose de los acreedores que amenazan con quitarle sus bienes? ¿O pasarse la vida dejando pendientes las decisiones que le podrían llevar a tener una mejor calidad de vida?

¡Qué importante es desarrollar la capacidad de creer en uno mismo para que pase lo que pase podamos sentir el poder para enfrentar cualquier situación, por inesperada o difícil que esta sea!

Si no nos enseñaron cómo sentirnos a salvo, o sentir ese poder, es posible desarrollarlo en nuestro interior. Pero esto solo es para personas que ya estén cansadas de tener que conformarse con una vida triste y sin sentido. He conocido personas que hoy están aprovechando las oportunidades que quienes están llenos de temores, han dejado pasar a su lado. Los guerreros, también tienen miedo. Pero saben bien cómo enfrentarlo. No dejan nada pendiente, ni se escudan con frases como “No puedo, no tengo tiempo, no tengo dinero”. Las frases de un guerrero más bien son del tipo: “Quiero saber cómo hacerlo” “Estoy dispuesto a hacerlo” “No he podido cumplir a tiempo, pero le cumplo en una semana sin falta”..Aclaro que no se quedan en palabras vacías, ya que un guerrero, sabe enfrentar sus problemas y cumple con su palabra.

Podríamos resumir la diferencia en que los avestruces ante un problema tienen una excusa y ninguna acción. El guerrero actúa y se hace responsable.

¿Te sientes satisfecho con los logros que has tenido? ¿Duermes tranquilo por las noches?

Si quieres ser guerrero, tengo una opción para ti. Por favor revisa la información de mi próximo taller.


Taller Vivencial: “LIBERANDO TU PODER INTERIOR”. Aprende a ser un guerrero de la vida. Domingo 15 de noviembre. 9:00-13:00hrs. Mayores informes: Tel. 955-06-60

e-mail: psi_laurareyes@hotmail.com

checa toda la informacion en: http://centrodespertares.blogspot.com/

Me lanzo al ONLINE

Holaaaa... Me da mucho gusto saludarte luego de un buen de tiempo que no pasaba por aquí... Te cuento que este ha sido un año maravi...